BONITAS SALIDAS
NO
SIEMPRE SE COBRAN PIEZAS
A UN ASI GUARDO UN GRATO RECUERDO
Uno de esos pocos días de caza, que mi mujer y yo
coincidíamos, solía ser un jueves al mes.
Claro está, toda la semana preparándolo. Remolque, coche limpio y toda la
indumentaria, dentro de los pertrechos se incluye el desayuno y la comida.
En
este coto teníamos dos tarjetas la de mi padre y la mía .
Un desayuno a lo grande |
Normalmente cuando es la época de codorniz, si vamos todos, desayunamos en la Cueva lugar de reunión de muchos cazadores de
esa zona, claro donde yo me encuentro
como pez en el agua con mis modelitos de ultima pasarela jajaja…
Esos días que solo vamos Mila y yo llevamos el termo con el
cola cao, las pastas , el zumo, esto para desayunar. Y para la comida la tortilla de rigor y los
filetes rusos o empanados (de hebra de cerdo) malas costumbres de camarero, que
termina uno deformado.
Pues nada desayunamos en el cazadero, salimos de caza, un día precioso, una señora
paliza, con un día de esos que yo digo al salir (hoy es un día para
triunfar).Las dimos un sinfín de vuelos, me estoy refiriendo a las Perdices,
que era lo que tocaba ese día.
Bonito cazadero |
Daba la impresión que las hubiesen cazado el día anterior,
no se dejaban ni ver, solo las oíamos, cazábamos unas zonas con mucha mata de
roble encina, y algún cárcavo donde suele haber conejos.
Como disfrutamos |
Nada de nada. Des pues de cuatro o cinco horas, ni ella ni
yo habíamos realizado un disparo.
Somos mas que compañeros |
Nos bajamos a comer, congestionados, nos esperaba un buen refrigerio, kás de limón con cerveza y frutos secos, eso lo primero, luego un poco
de vino de aguja,(cresta rosa) con la comida.
Como unos señores de los de andar por casa, eso si,
orgullosos de ser como somos, no
necesitábamos más.
Buena comida y buena compañia |
Terminamos de comer, postre incluido, que para eso llevo
remolque, para que no nos falte de nada, para un día al mes que podíamos ir juntos.
Una vez que reposamos la comida, dimos una vuelta de una hora, la Salió la Libre a Mila, no pudiéndola tirar,
porque al momento se dejo caer por un cortante.
(esta liebre la cobre yo el último jueves de la temporada) nada que no era nuestro día de cobrar piezas
,pero fue un gran día.
Con esto me conformo |
Cuando llegamos a casa, nos estaba esperando
nuestro hijo en el portal, para subir las posibles piezas y enseñarlas.
Nene hoy nada.
Otra de las salidas con gratos recuerdo la efectuamos en un nuevo coto, era nuestro primer año en
esos terrenos, y desconocimos la tendencia
de las perdices una vez voladas.
Desayunamos, en el lugar de reunión habitual de todos los
cazadores que disponen de un coto en un
radio de cuarenta kilómetros, se llama la Cueva, en Alar del Rey bar de carreta que cuenta con una gran
aceptación por parte de la mayoría de cazadores
.
Yo llevo desayunando más de 36 años.
Espacios sin nombre |
Tengo que decir que los dueños (dos hermanos) tienen el cielo ganado (si le hay), pues los ponemos
a caldo, todos los días todos los que
entramos, según nosotros tienen los
precios más caros de todo Palencia y Burgos.
Sus hojaldres, son míticos, los realizan las Monjas del
Monasterio San Andrés de Arroyo llevan
miel de relleno, todo un lujo. No puedo decir como los llamamos…..
Pues una vez desayunado, fuimos al cazadero a siete
kilómetros, situamos el coche al lado del depósito de agua de la traída, y nos separamos
treinta metros.
Una ladera de Pinos, en frente matas de Roble Encina, yo
recorrí todo el Pinar hasta su cabecera tenía un macho de perdiz, que no
callaba, dos veces que intente acercarme, salía y solo percibía su sonido lejano.
Mi señora estaba enfrente del pinar esperando a que yo bajara de la ladera.
Yo había realizado un solo disparo, pero
fallido. Movimos toda la mata de Encinas, salieron dos parejas y una sola, nada
las perdíamos y no volvíamos a levantarlas.
Mi braca Dina y mi Caballero Inbles Toño |
Se acercaba el medio día, habíamos visto siete u ocho
perdices sueltas, pero ninguna cobrada.
Teníamos enfrente nuestro dos perros latiendo una liebre, y
dos cazadores posicionados, nos sentamos para ver bien toda la faena, y me
recordó lo que me había contado Toñin, un compañero de mi coto
actual,
Un suceso de la temporada anterior en aquel coto.
Me conto que una
mañana escuchaba el levante de una liebre,
y veía como los perros la llevaban delante, cual es su sorpresa que ve venir la liebre en dirección a la ladera donde estaba, en esto que escucho dos
detonaciones.
Salen de detrás de una mata dos cazadores, ( son hermanos, los conozco ) recogen la
liebre y se van alejando, los perros llegan y en unos minutos llega uno de los propietarios de los sabuesos al
lugar donde se supone estaba la
pieza, los perros dando vueltas y el cazador no veía nada. Al ver a los cazadores alejarse les llama
desde lejos, ellos como el que no
escucha , se siguen alejando.
El cazador de liebre se adelanta corriendo y alcanza a los
cazadores, Toñin viendo toda la escena, vio la discusión un buen rato, pero al
final,se llevaron la liebre.
No daba crédito a lo
visto, ni siquiera se la han dejado morder a los perros. Hay una ley no escrita
que por lo menos deben dejar morder la pieza a los perros que la habían levantado.
Toñin pensó que los que
la habían tirado y cobrado habían visto todo el proceso de cómo y porque la liebre había llegado allí.
Son de esas cosas que te marcan, no se olvida fácilmente una
escena como esa. Pero como intervenir y llamar la atención a los que cobraron la
liebre, si el dueño de los sabuesos no la había tirado.
En el coto no se tenía dividido la caza de de la liebre y de
la perdiz, por ello me conto que
no intervino.
Habíamos descansado un rato y conversado sobre lo me habían
dicho Toñin y que yo contaba, nos levantamos y bajamos a las tierras donde se habían
retirado los cazadores y los sabuesos
.
La Dina y el Toño , habían estado en todo momento junto a
nosotros, como si se hubieran dado cuenta de lo que sucedía, pendientes del sonido que emitían aquellos perros. Nos
separamos en ala treinta metros y nos dirigíamos a donde teníamos el coche, daba
la impresión de que se nos habían acabado las ganas de cazar por hoy, la Dina
que iba con ella se ha quedado puesta en una lindera, la ha arrancado una
perdiz y me ha avisado mi mujer, venia en mi dirección
DIA DE FORTUNA |
Al segundo disparo ha caído, el Toño me la ha cobrado, en
esto que llegaba mi señora y Dina
Nos hemos abrazado, la he dado las gracias, me traes suerte.
La hemos guardado en el chaleco y nos encaminamos en la
misma dirección, cuando pasábamos por el lugar donde se había levantado la
perdiz, los perros se han tocado mucho y la digo, nena mira que si esta por
aquí la pareja, los perros seguían tocándose, salimos de la lindera de la
tierra a la pista, sin más.
Los perros por delante de nosotros, y el coche a unos
treinta metros, estaba quitando los
cartuchos cuando me dice, mira la Dina,
yo creo que esta puesta.
Arranco corriendo, cargo dos cartuchos me acerco, meto el tercero, me abro para un
lado
Había unas cuantas ulagas (un escajo) muy propio de Castilla
que les gusta mucho a la perdiz para
criar .La perra no se movía yo no veía nada, pasaba el tiempo y nada. En esto
que me llama Mila y me dice vamos que no hay nada.
Lo que es disfrutar de buena compañia |
El nada fue como un resorte, a menos de un metro mío, voto
un pedazo de perdiz que me asusto, tiro para arriba como un cohete, tiempo que
medio para cubrirla y abatirla de un buen
Disparo, seca. No fui a cobrarla fui a darle un beso a mi
chica, la digo, siempre que vienes
Me das buna suerte. Solo teníamos una tarjeta del coto y una escopeta, fue mi
primer año sin mi padre.
Llegamos al coche y como habíamos cobrado las dos de cupo,
guarde los trastos y nos sentamos a comer.
El día fue redondo, como lo contado de la
otra Salida, con la salvedad de que hoy tenía algo para mostrar, y algo
para reflexionar del comentario sobre los cazadores de liebre
Un dia perfecto |
Hoy los perros (posiblemente los mismos perros de que hablo) no
habían ni levantado ni mordido .Cuando
la levantaron la otra vez se la cobraron otros, debemos ser más personas, no todo debe valer
.
No he olvidado el
relato y he pensado alguna vez cómo pudo ser la escena de la cacería de la liebre.
Post realizado por Jesús
José
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